La entrada a la colina tras 90 días de mucho calor.
Han sido tres meses de calor (a veces intenso) pero con la llegada inminente de septiembre también han vuelto las lluvias. Desde ayer, martes 29, no ha dejado de llover. Nada espectacular pero eso sí, sin parar. Esa lluvia tan buena para el suelo, la que recala y cuyo efecto se hará notar durante varios días.
Nuevos brotes en ambos algarrobos. ¡Por fin se nota que han arraigado bien!
Y aunque varias plantas han quedado tocada por el calor (el tomillo y los pinos en particular), ahora cabe esperar que todos (plantas, arbustos y árboles) estén listos para afrontar el otoño antes de la 2ª Reforestación prevista entre Octubre y Noviembre.
